7 de septiembre
«Liceo San Clemente», Vilches, Región del Maule
Primera parte: Juego en Bosque
Se distribuye el espacio en 4 mesas de trabajo y una de apoyo audiovisual (con un monitor y un ordenador). El taller comienza con una introducción a la materia de sonido: qué es, como oímos y algunos ejemplos y fenómenos de la naturaleza. Los alumn@s son divididos en 4 grupos (con un monitor cada uno) y se les hace entrega de dos kits, piezas de caracolas (grupales), luego piezas de máscaras auditivas y parábolas. Paralelamente se posionaron «trampas sonoras» dentro del recorrido en terreno. Al finalizar el armado de los kit, se da un break, para luego comenzar el recorrido intercalados por grupos. La activdad comienza desde la entrada a un sendero ubicado a 200m del refugio. Los participantes, con sus respectivas máscaras, van capturando banderines ubicados en las trampas que van encontrando (9 en total); a la vez que se recopilan sonidos distinguibles con las grabadoras (ubicadas dentro de la parábola receptora de sonido). Finalizado el recorrido se vuelve al recinto, se da una pausa de almuerzo y luego se continúa con la segunda parte del taller.
El juego se llevó a cabo muy fluidamente, al tener los estudiantes objetivos definidos se tornó un poco competitivo, pero esto mismo llevó a mantenerlos entretenidos. Las trampas sonoras funcionaron muy bien, así también los banderines que las acompañaban. La lluvia y nieve fueron un plus, que hizo el taller más «extremo», 100% en contacto con la realidad del lugar, el recorrido por el bosque aún más interesante y divertido para los alumnos. Las máscaras y parabólicas cumplieron su función de reducir la visión, para aumentar y direccionar las ondas sonoras. Los alumnos manifiestan que este objeto potencia la atención auditiva que debían prestar al paisaje y sus sonidos.
Segunda parte: Trabajo con el Sonido
Se dispone a los alumnos en 3 mesas de 5 a 6, en donde se les realizan preguntas, a modo de reflexión de la primera experiencia, a la par que se comienza la parte de «visualización del sonido». Cada participante recibe pinceles y tintas, con las que dibuja en un pliego de papel cómo cree que se ven los sonidos que recopilaron y de dónde creen que provienen. Realizado esto, monitores les presentan material audiovisual en donde pueden ver qué son o cómo son producidos estos sonidos.
Tercera Parte: Espacio Sonoro
La última parte correspondió a la unión de las caracolas fabricadas durante la mañana, con tubos y parlantes (con másking y uniones prefabricadas en las piezas); para luego ser colgadas (con cuerdas) y dispuestas alrededor de la sala. Finalmente, se vivió una experiencia sonora en donde 4 pares de caracolas reproducían los sonidos recolectados. Se terminó la jornada con una reflexión entre alumn@s, profesores y demás participantes sentados en circulo alrededor y bajo las caracolas.
Se crea un ambiente de tranquilidad y reflexión al momento de vivir la experiencia sonora con las caracolas. Alumn@s manifiestan que la experiencia les sirvió para reconocer la voz de la naturaleza, que nos habla a escalas que no percibimos. Las caracolas sonoras cumplieron su función de redireccionar el sonido que cada grupo presenta, formando una exposición sonora que logra traer la experiencia en terreno a este recinto cerrado.
«Se logró que el alumno entendiera cómo el sonido se propaga; que se puede lograr una visión completamente diferente a partir del oído, quitando los prejuicios visuales y dejando paso a la imaginación de cómo se ven las cosas; que comprendiera el territorio desde otra dimensión, y que el oído es también un método para reconocer y conocer el entorno = cada lugar tiene sus sonidos característicos y propios; que al prescindir de un sentido, se aumenta la atención en los demás sentidos.
Para más información:
http://biogeoart.wikidot.com/tallerpaisajesonoro/